Cada vez me encuentro con más compañeros, amigos, conocidos, etc. que cuando conocen que estoy en Twitter me preguntan «¿y eso para qué sirve?». Sorprendentemente siempre me cuesta mucho explicarlo, así que quizás por organizar mis propias ideas o quizás por comodidad (ahora cada vez que me pregunten puedo dirigirlos a este blog 😛 ) he decidido que era hora de intentar explicar qué veo en twitter.
Imagen de Matt Hamm (Flickr)
Twitter es un sitio web de microblogging, lo cual nos lleva a pensar que es un blog en pequeñito. Pues así es. Tan pequeñito que no te deja escribir más de 140 caracteres. Ese pequeño y conciso mensaje lo lanzas al vacío, al ciberespacio. Cuando escribí mi primer mensaje en Twitter me sentí como que más que hablar a la red hablaba conmigo misma. Con MyTweet16 he podido ver cuál fueron mis primeros tweets en 2008. Cosas como «Estoy aprendiendo a utilizar Twitter» «¿Es que no se puede borrar lo que se pone?». Lo primero que hay que comprender es que esos mensajes que tu escribes puedan ser vistos por cualquier usuario de Internet (si tienes los tweets (mensajes) abiertos, que es lo normal) pero seguramente llegarán a verlo realmente las personas que te siguen, tus seguidores.
Lo siguiente que hice fue buscar gente a la que seguir, sobretodo a partir de los contactos de contactos (ya sabéis lo que dice la canción «los amigos de mis amigos son mis amigos»). Y encontré a grandes profesionales que siempre he admirado del ámbito de la educación y las TIC. Empecé a ver sus mensajes y me di cuenta de que Twitter me servía para APRENDER. Para conocer enlaces que adjuntaban, para comentar noticias, realidades, experiencias, congresos, etc, etc, etc.
Empiezas a darte cuenta que es un entorno que tiene sus propios lenguajes, para dirigirte a alguien y que esa persona pueda ver que hablas con él/ella se pone el @ delante de su nombre. te das cuenta que puedes ver quién te ha dirigido un tweet en @Menciones.
Sin darte cuenta empiezas a tener seguidores, esto emociona bastante al principio porque te das cuenta que tus tweets no irán al vacío y empiezas a disfrutar la sensación de poder aportar algo a alguien, la sensación de COMPARTIR.
Comienzas a adentrarte en otros servicios como los mensajes directos (para esos tweets que diriges sólo a alguien y que no quieres que nadie más vea), las listas (en las que incluyes a gente por temáticas, perfiles, etc. y que te permiten ver los últimos tweets de esas personas) y finalmente te adentras en el gran mundo de los hashtag (identificado con el símbolo #). Te das cuenta que muchos famosos tienen Twitter y que puedes incluso cotillear lo que hacen, empiezas también ver como muchas empresas utilizan este entorno como medio para darse a conocer.
El mundo de los hashtag fue todo un descubrimiento para mí, gracias a los hashtag asistí en directo a la reunión con la Ministra Sinde con respecto a la Ley de Internet gracias a los tweets de los internautas que comentaban la reunión en directo (#canon) , contemplé abrumada los testimonios en directo del terremoto de Haití (#Haiti), me destornillé de risa ante los comentarios de la miniserie de Felipe y Leticia (#felipeyletizia), me indigné con el resto de cibernatuas ante la huelga encubierta de los controladores (#controladores) y asistí en directo a congresos y encuentros a los que no pude ir pero de los que aprendí enormemente (#gef10, #aviles2010…).
En todos estos eventos que he comentado he observado como los medios de comunicación utilizaban Twitter para publicar noticias siendo consciente de que estaba contemplando ese nuevo periodismo ciudadano del que habla todo el mundo, y es que la información va de abajo arriba, los cuidadanos informan en directo a los medios y estos toman estos testimonios como parte de las noticias.
Parece que los 140 caracteres ya no parecen tan escasos, aunque podamos incluir mensajes personales (quien no le ha echado una foto a esa pedazo de paella que ha hecho el Domingo o ha comentado lo cansado que estaba y que se iba a la cama) yo quiero destacar una de las mayores aportaciones que ha hecho Twitter a mi trabajo como profesora. Soy docente a alumnos de Magisterio. Me gusta actualizar el contenido, acercarlo a la realidad que se van a encontrar en el aula. Un día me interesé por el tema de las competencias, sobretodo a la hora de planificarlas en el currículo, en la Unidad Didáctica. Y puedo decir que gracias a las aportaciones de muchos compañeros (profes a pie de aula, expertos en didáctica, interesados en la materia…) pude mejorar mi material de enseñanza, pude aprender más cosas para al mismo tiempo intentar transmitirla a mis alumnos, los beneficios de esa colaboración, de esa ayuda interesada van más allá de lo que muchas veces pensamos.
Porque todas estas cosas no las posibilita únicamente la plataforma Twitter, la herramienta es el medio que lo facilita, lo que me ha enriquecido son las personas, los profesionales que comentan sus ideas, preocupaciones, inquietudes, experiencias. Los compañeros que contestan las dudas, envían materiales, proponen colaboraciones… todos ellos son los que hacen Twitter, las personas somos las que hacemos Twitter. Y no puedo dejar pasar este mensaje (que ha sido muuucho más largo de 140 caracteres) para agradecerlo. ¡GRACIAS!
Esta es mi historia de momento con Twitter. Una historia que no tiene final, sino que continua.
Nos vemos en el ciberespacio.
Magnífico, Mª del Mar.
Eso es Twitter, nada más y nada menos… y allí estamos y allí seguimos… siempre compartiendo.
Un abrazo.
Magnífica entrada. He llegado a ella vía Twitter, como no podía ser de otra manera.
Creo que he seguido una evolución paralela a la tuya en cuanto a mi relación con Twitter, y aún hoy me cuesta explicarla. Creo que a los que me pregunten les redirigiré a tu post.
Gracias por compartirlo.
La verdad es que esta entrada me a servido de gran ayuda ya que soy nuevo en Twitter y este es un fantástico manual…gracias!
Muy provechosa, la verdad es que queda clarisimo.Otra novata,agradecida.
para mí también es nuevo esto de twitter, pero creo va a ser una cosa más que abrir siempre que me siente con el ordenador…y gracias!!
Cierto Vanessa,de hecho para mí Twitter ya es imprescindible y creo que va a continuar siéndolo.Muy interesante la entrada, María del Mar.